jueves, 21 de mayo de 2009

Tarantino y Von Trier en Cannes


(AFP. Los Tiempos, Blogdecine) Entre el aplauso y la decepción, el Festival de Cine de Cannes continúa hasta el próximpo 24 de mayo. El film epico de Alejandro Amenabar Agora fue acogido positivamente por la crítica. No es el caso de dos afamados directores como lo son Quentin Tarantino y Lars Von Trier. Ganadores ambos de la Palma de Oro del Festival, sus dos últimas producciones han causado, en general, decepción entre la crítica y el público.
Tarantino
La última película del director norteamericano, Quentin Tarantino, Inglorious Bastards se estrenó en el sexto día del Festival de Cine de Cannes, llamando poderosamente la atención de la crítica que aún no decide si catalogarla como la mejor o la peor producción de la carrera cinematográfica del director norteamericano.
Con Inglourious Bastards se trabaja en un gènro en el cual el director no había incursionado antes: el cine bélico. La película se ambienta en la Segunda Guerra Mundial y cuenta la historia del sangriento accionar de un grupo de soldados judíos, liderados por el teniente Aldo Raine (Brad Pitt), que intenta combatir a los nazis apelando a las más sádicas de las venganzas.“Es simplemente la historia de unos personajes que, si de verdad hubieran existido, sí podrían haber cambiado el rumbo de la Historia”, explicó Tarantino a la prensa.

El batallón terminará aliándose con una joven francesa dueña de un cine (Mélanie Laurent) y una estrella del cine alemán convertida en espía (Diane Kruger), para organizar un atentado contra los jerarcas del Tercer Reich (Hitler, Goebbels y Göring). Tarantino también incluye en este film un nuevo rostro, la del alemán Daniel Bruhl, que interpreta al héroe de guerra.

En Cannes se exhibió una versión de 160 minutos de la película, pero Tarantino admitió que está dispuesto a volver a la isla de edición para reducir la duración. En cuanto a sus posibilidades de alzarse con algún premio en la gala del domingo, Tarantino no cree que haber presidido el jurado y haber ganado la Palma de Oro con anterioridad con Pulp Fiction, sea un inconveniente en el Festival de Cannes.

Anticristo de Lars Von Trier
La crítica ha calificado el film de Lars Von Trier de “ultra violento, angustioso, sexual, pretencioso, híper estético, misógino…” y se ha preguntado si se trata de una verdadera relectura del horror o si es un simple golpe de efecto. Las reacciones a la salida de la proyección, que se realizó el lunes 18 en el Festival de Cannes, eran encontradas e incluso hizo falta echar mano de los bomberos para que reanimasen a una persona que había sufrido un desmayo.


El propio cineasta danés contó que hizo la película como "terapia" después de haber sufrido una fuerte depresión y utilizó para hacerla "la mitad de sus capacidades físicas e intelectuales". Interpretada por el norteamericano Willem Dafoe y la francesa Charlotte Gainsbourg, la película narra el luto de una pareja después de la muerte de su hijo. El hombre decide asumir como psicoterapeuta el tratamiento de su esposa, profundamente traumatizada y culpabilizada.

Los dos se refugian en una cabaña perdida en medio de un bosque, llamado Edén, un diabólico paraíso en el que la naturaleza se torna cada vez más amenazante, y la mujer cada vez más violenta y enajenada.
Después de una primera parte, magistralmente filmada (la muerte del hijo, que cae por la ventana mientras la pareja hace el amor, los intentos de reconstrucción de la relación tras el drama), Lars Von Trier cambia de registro, pasando al cine de terror, a las imágenes "gore" y a una violencia chocante y gratuita, con insoportables escenas de tortura y mutilación sexual.

Lars Von Trier, creador del Dogma y asiduo participante del Festival de Cannes, donde presentó numerosas películas (Breaking the waves, Dogville, Manderlay), obtuvo la Palma de Oro en 2000 por el deslumbrante melodrama musical, protagonizado por la cantante finlandesa Bjork, Bailando en la obscuridad.

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